Michaël trabaja principalmente con su cámara en París y también en un colectivo con Nausicaa Preiss, un documentalista de sonido. Compró una de las cámaras de Sébastien Bergeron en 2017 después de conocerlas en el sitio web de ABCP. Michaël adaptó su cámara ligeramente a sus necesidades y la decoró con amuletos de la suerte.