Santiago Fernández es un fotoperiodista radicado en Quito, Ecuador. Construyó su cámara de caja en 2016 cuando recibió 32 cajas de papel fotográfico Negtor 9×13 (una marca española que expiró en los años 80). El papel era demasiado pequeño para realizar impresiones y el papel a base de fibra vencido no tendrá un resultado constante. Entonces decidió usar el como negativo. Consiguió una lente rusa Industar de 210 mm y comenzó a trabajar con la cámara de caja. Actualmente está experimentando con huellas de sal.